Ya me he cansado de ser la buena
Este post lo escribí anoche antes de irme a dormir, en una de mis reflexiones nocturnas. Hoy no sé si sigo pensando igual o he cambiado de opinión. Si me pasé o me quedé corta. Anoche sentía rabia, hoy creo que ya no. Mi "yo" inocente me dice que no tengo razón, que sólo es que he tenido mala suerte, que estas cosas pasan y que no hay para tanto. Mientras que mi "yo" egoísta dice que no es justo, que hay mucho cabronazo suelto por ahí y que no tienen ningún derecho a tratarme de esa forma. Sea como sea, aquí lo dejo.
A los tíos que alguna vez me habéis hecho daño:
En estos momentos siento que no quiero saber nada de vosotros. Estoy harta de que juguéis con los sentimientos de la gente, concretamente con los míos. De que me hagáis sentir como una mierda, como si no fuese lo bastante buena para vosotros. Creo que he aguantado mucho, sin enfadarme, perdonando, sin guardar ningún rencor. Pero todo tiene un límite. Tal vez paguen justos por pecadores, pero así es la vida. Así somos los humanos, yo también tengo sentimientos irracionales y ya me he cansado de reprimirlos. Ahora mismo estoy muy enfadada con el género masculino -en cuya inocencia creo cada día menos-, especialmente con los que habéis contribuido a la causa "hagamos sufrir a Sara". Por mí podéis iros a tomar viento fresco. Quisiera seguir creyendo que los hay que merecen la pena, pero cada vez aparecen más pruebas en contra. Todos mis ideales se van derrumbando uno a uno. Todos los príncipes que he conocido han acabado siendo solamente ranas.
A los y las que no os deis por aludidos, que probablemente seáis todos los que leáis esto ya que dudo que alguno de los susodichos llegue a hacerlo, no os preocupéis por mí, estoy bien. No creáis que hablo de los hombres en general, tan sólo de un sector en concreto. De momento sigo teniendo fe en que no son (sois) todos iguales. Solamente necesito encontrar alguna prueba. Una vez más, sólo estaba desahogándome.
A los tíos que alguna vez me habéis hecho daño:
En estos momentos siento que no quiero saber nada de vosotros. Estoy harta de que juguéis con los sentimientos de la gente, concretamente con los míos. De que me hagáis sentir como una mierda, como si no fuese lo bastante buena para vosotros. Creo que he aguantado mucho, sin enfadarme, perdonando, sin guardar ningún rencor. Pero todo tiene un límite. Tal vez paguen justos por pecadores, pero así es la vida. Así somos los humanos, yo también tengo sentimientos irracionales y ya me he cansado de reprimirlos. Ahora mismo estoy muy enfadada con el género masculino -en cuya inocencia creo cada día menos-, especialmente con los que habéis contribuido a la causa "hagamos sufrir a Sara". Por mí podéis iros a tomar viento fresco. Quisiera seguir creyendo que los hay que merecen la pena, pero cada vez aparecen más pruebas en contra. Todos mis ideales se van derrumbando uno a uno. Todos los príncipes que he conocido han acabado siendo solamente ranas.
A los y las que no os deis por aludidos, que probablemente seáis todos los que leáis esto ya que dudo que alguno de los susodichos llegue a hacerlo, no os preocupéis por mí, estoy bien. No creáis que hablo de los hombres en general, tan sólo de un sector en concreto. De momento sigo teniendo fe en que no son (sois) todos iguales. Solamente necesito encontrar alguna prueba. Una vez más, sólo estaba desahogándome.